martes, 11 de noviembre de 2014

Algunas Cuestiones sobre la Industrialización de las Naciones (Parte II): Estados Unidos, Rusia y Alemania

1. Comentar la siguiente afirmación desde la óptica del ahorro de recursos productivos (modelo de R. Fogel): “Los ferrocarriles fueron indispensables para el crecimiento económico de los Estados Unidos”.

Desde la perspectiva del modelo de Robert Fogel, Premio Nobel de Economía de 1993, habría que ser cauteloso con esa afirmación. Decir que un factor es “indispensable” implica decir que sin él no se hubiera dado el fenómeno en cuestión y habría que examinar si eso es rigurosamente cierto. En ese contexto R. Fogel aplica un análisis contrafactual en el que supone un Estados Unidos sin ferrocarriles comparando luego, para el año 1890, con la situación real en que sí se tienen ferrocarriles. Su modelo se basa en los siguiente tres supuestos: 1º demanda inelástica (se transporta lo mismo con ferrocarril o con los medios de transporte alternativos), 2º pleno empleo (o sea, se llega al PBI potencial) y 3º los precios y costes son los mismos con o sin ferrocarril (asumiendo que haya competencia perfecta).

Pues bien, lo que Fogel halla en su estudio que el ahorro social -es decir, la pérdida de producto por usar medios de transporte alternativos- es negativo, lo cual contradice la hipótesis de que el ferrocarril era más eficiente en términos de ahorro de recursos. Gráficamente:


Entonces plantea que también hay que considerar los “efectos ocultos del ferrocarril” por cuanto es más rápido, seguro y regular. Nuevamente vuelve a realizar la comparación teniendo en cuenta ese efecto y aun así halla que el ahorro social sigue siendo negativo, aunque ligeramente. Por tanto, desde la óptica del ahorro de recursos en el modelo de Fogel, los ferrocarriles no parecen del todo “indispensables”.

2. Comentar la siguiente afirmación: “La Guerra de Secesión norteamericana fue un baño de sangre innecesario para la supresión de la esclavitud”.

Bueno, en torno a esa afirmación hay un amplio debate entre historiadores económicos. Así por ejemplo, el historiador Ulrich Bonnell Phillips sostiene que no era necesaria una Guerra Civil para acabar con la esclavitud ya que ésta estaba perdiendo su rentabilidad pues el precio de los esclavos estaba creciendo mucho más rápido que el precio del algodón siendo que el incremento del precio de los esclavos no se daba propiamente porque estos fueran más productivos sino porque de todas maneras las clases adineradas del Sur deseaban tener esclavos porque era socialmente bien visto. Sin embargo, Phillips argumento que eso no era viable de mantener y, por tanto, la esclavitud hubiera desaparecido por sí misma en un período relativamente corto sin necesidad de mayor “baño de sangre”.

Por otra parte, John Meyer y Alfred Conrad abordaron el mismo problema pero desde una perspectiva diferente realizando análisis econométricos de la rentabilidad de los esclavos. En su estudio hallaron que la tasa de rentabilidad de los esclavos hombres era de 5 a 8% y de mujeres de 7 a 8%, siendo que esa mayor rentabilidad en las segundas se explica por su función reproductora. Ahora bien,  esa era una rentabilidad similar a la de inversiones alternativas y, por tanto, contradice aquello que decía Phillips de que la esclavitud no era rentable. Y  eso considerando tierras normales. En tierras más productivas donde la productividad era todavía mayor, tener esclavos debía ser aún más rentable. Por tanto, ellos concluyen que la Guerra de Secesión sí era necesaria para liberar a los esclavos.

Finalmente, hay también que mencionar a R. Fogel, quien se sumó al debate señalando algunos aspectos interesantes a tener en cuenta como que los esclavos negros del Sur vivían relativamente bien comparados con los obreros blancos, de modo que el mercado del Sur no era tan reducido como se decía, y que, además, la agricultura era de todas formas la ventaja comparativa del Sur y no es que se dedicaran a ella meramente porque tenía esclavos (luego de la abolición de la esclavitud siguieron dedicándose al cultivo de algodón).

3. ¿Qué importante precondición para el crecimiento económico estaba ausente en Alemania a finales del siglo XVIII? Enumeren 4 obstáculos para la industrialización en esa época.

La importante precondición para el crecimiento económico que estaba ausente en Alemania hacia finales del siglo XVIII era la relacionada con un mercado lo suficientemente grande para vender los productos. De este modo, y considerando también otros aspectos, pueden enumerarse los siguientes 4 obstáculos para la industrialización de Alemania en esa época:

1º Su gran fragmentación económica, administrativa y territorial al hallarse dividida en los alrededor de 350 estados del llamado Sacro Imperio Romano Germánico. Ello se solucionó luego con la “Unión aduanera”.

2º El hecho de que aun subsistían relaciones señoriales-feudales que restringían el desarrollo de las fuerzas productivas. Eso se solucionó luego con un proceso de desmantelamiento del Antiguo Régimen en que se liberaba a los siervos bajo ciertas condiciones.

3º Que los costes de transporte eran todavía restrictivos. Eso se solucionó luego con la incorporación y desarrollo de ferrocarriles.

4º Insuficiencia de capital para acometer grandes inversiones dado que no bastaba con los ahorros privados. Eso se solucionó luego con la creación y fomento de la banca industrial alemana.

4. Comentar la siguiente afirmación: “Ferrocarriles y Zollverein fueron hermanos siameses”.

Esta frase pertenece al famoso economista alemán Friedrich List. Y, en efecto, resulta bastante pertinente para el caso de Alemania. Siendo el principal limitante de este país la ausencia de un mercado amplio por causa de la excesiva fragmentación se comenzó a formar el “Zolverein”, es decir, la Unión Aduanera de los Estados de Alemania con lo cual se eliminaban los aranceles entre los estados miembros (librecambismo) y se imponían para los estados no miembros (proteccionismo). No obstante, aún quedaba el limitante de los costos de transporte que todavía eran restrictivos. Para solucionar ello los estados alemanes comenzaron a construir ferrocarriles y con eso bajaron los costos de transporte y el precio final de los bienes era menor. De este modo, tanto la creación del Zollverein como el desarrollo de los ferrocarriles tuvieron el efecto de agilizar el comercio y, por ende, ampliar el mercado y es por ello que resulta pertinente la frase “Ferrocarriles y Zollverin fueron hermanos siameses”.

5. ¿Por qué se dice que cárteles y bancos fueron los pilares de la industrialización alemana?

El desmantelamiento del Antiguo Régimen, la creación de la Unión Aduanera y la incorporación de ferrocarriles hicieron posible la generación de mercados más amplios y dinámicos en la Alemania de la primera mitad del siglo XIX. No obstante, todavía se requerían grandes cantidades de capital para acometer las inversiones y los ahorros privados no bastaban pues la agricultura incumplió su segunda función respecto de la industrialización (liberar recursos). Es allí donde aparece un importante agente: la banca industrial alemana. Los bancos industriales no sólo prestaban dinero sino también aportaban gestores con participación directa en la administración de las empresas obteniendo así información de primerísima mano sobre la marcha de las mismas. En este contexto, la banca fue un factor clave porque diseñó y modeló gran parte de la estructura industrial alemana.

Y esto nos lleva al tema de los cárteles. Sucede que, dado que la Segunda Revolución Industrial fue muy capital-intensiva, el mercado alemán fue dominado por empresas grandes con control de mercado (oligopolios). Estas empresas llegaron a acuerdos formando lo que conocemos como “cárteles”. A través de estos cárteles se financiaba la Investigación y Desarrollo (I+D) y se aplicaban políticas de discriminación de precio, vendiendo más barato en el mercado internacional, incluso con pérdidas (dumping), las cuales se compensaban con los beneficios obtenidos por vender más caro en el mercado interior. Gráficamente podríamos representar esta política de dumping como:


Con ello las empresas amplían su escala de operaciones hasta el punto de costes mínimos aprovechando las economías de escala y haciéndose fuertemente competitivas en corto tiempo. Es claro, entonces, que tanto la banca como los cárteles fueron los pilares de la industrialización alemana.

6. Comentar la siguiente afirmación: “El Conde Serguei de Witte fue el supremo hacedor de sustituciones”.

El Conde Serguei de Witte fue Ministro de Hacienda de Rusia en el régimen del zar Alejandro III. Y se puede decir con verdad que él fue “el supremo hacedor de sustituciones” por cuanto precisamente ayudó a hacer viable la industrialización de Rusia allí donde faltaban los prerrequisitos básicos para ello. En efecto, a Rusia le faltaba capital y tecnología y lo que se hizo fue, dada la convertibilidad del rublo por el aumento en el stock de oro producto de las exportaciones agrícolas, incentivar la entrada de capital extranjero que por supuesto traía tecnología más avanzada. De hecho se le dio condiciones especiales al capital extranjero para invertir siendo que con el sistema de cuotas y aranceles del gobierno ruso, se les aseguraba el mercado a las empresas. De este modo, esto también se relaciona con otra importante sustitución pues a insuficiencia de demanda privada se echó mano de la demanda pública. Asimismo se tomaron otras medidas complementarias interesantes como impulsar la construcción de ferrocarriles o cobrar impuestos en época de verano dado que la agricultura no liberaba recursos y con ello se obligaba a los agricultores a no acaparar sino a llevar al mercado los bienes para que se vendan y con ello aumentan las exportaciones y, por ende, las divisas. Asimismo, para enfrentar la insuficiencia de capital, también se crearon bancos de fomento a la agricultura y de apoyo a la industrialización. En suma, con todas esas y otras inteligentes medidas se puede decir que “El Conde Serguei de Witte fue el supremo hacedor de sustituciones”.

7. Indiquen 5 diferencias entre las industrializaciones de Inglaterra y la Rusia zarista.

Entre los procesos de industrialización de Inglaterra y la Rusia zarista pueden señalarse las siguientes diferencias:

1º En Inglaterra el Estado se limita a establecer un marco legal para que funcione el mercado pero no es mayormente intervencionista. En Rusia el Estado sí tuvo una intervención muy clara en el proceso de industrialización e incluso en la creación de mercados.

2º Inglaterra tuvo un proceso de industrialización temprana. Más aún: fue pionero en lo que es la industrialización con la Primera Revolución Industrial. En cambio Rusia tuvo una industrialización bastante tardía propia de la Segunda Revolución Industrial.

3º El proceso de industrialización inglés lento y durante un período amplio; en cambio Rusia, cuando se industrializó, lo hizo rápidamente y en un periodo más corto con tasas de un promedio de 8% anual a partir de 1890, duplicando su producción cada 10 años.

4º En Inglaterra se adoptaban ideas de otros lugares y generaban si propio tecnología; en cambio Rusia tuvo que importar directamente la tecnología de fuera.

5º La agricultura inglesa cumplió muy bien sus tres funciones en el proceso de industrialización: proveer de alimento a la población en aumento, liberar factores de producción y ampliar el mercado. No pasaba esto en Rusia durante el siglo XIX.

8. Indiquen 2 diferencias y 2 similitudes entre las industrializaciones alemana y norteamericana.

Entre las diferencias entre la industrialización alemana y norteamericana podemos señalar las 2 siguientes:

1º En Alemania las grandes empresas oligopólicas formaban “cárteles”. En Estados Unidos eso estaba prohibido por la Ley Sherman de 1890.

2º La frontera de Estados Unidos estaba continuamente expandiéndose y con ello aumentaba la dotación de tierra con los importantes recursos del subsuelo que ello implica. El territorio alemán más que nada se reorganizó con la Unión Aduanera pero no se expandió como sí hizo el estadounidense.

Respecto de las similitudes:

1º Ambos tenían importantes reservas de recursos naturales que los habilitaban para la industrialización. Estados Unidos descubrió que tenía abundante petróleo (sobre todo en Texas, que arrebató a México) y a su vez Alemania también tenía importantes recursos minerales en su subsuelo.

2º Ambos desarrollaron tecnología propia en sectores claves de la Segunda Revolución Industrial.

Madrid - España, noviembre de 2014, cuestiones planteadas en "Desarrollo Económico Internacional" del Máster en Economía de la Universidad Complutense de Madrid.